La Nueva Crèmerie

Este sitio ya no es lo que era

8/03/2007

Se acabó

Llegó la hora de echar el cierre. Como biem dice Vemga, los blogs nacen y mueren. Este nació, creció, se transformó (podríamos hablar incluso de blog transexual), y ahora muere.

Cuando un blog nace, lo hace por una razón. Siempre me digo que en esta vida nada es gratuito, aunque casi todo tenga esa apariencia. La Cremerie nació con una vocación clara, lo que pasa es que luego la cambió. Esta falta de constancia, unida a la ausencia total de ideales han propiciado, en mi humilde opinión, vuestra fidelidad. Ni objetivos ni ideas, es que eso mola.

Pero la vida se acaba. Hubo momentos grandes y momentos pequeños. A un comienzo ilusionante le siguieron las ya clásicas épocas depresivas, que llevaron a lapsos de optimismo extremo (porque hay que compensar), y por supuesto mis favoritas: las temporadas sin sentimientos ñoños (durante las que se habló de sectas, sudokus y otras cuestiones molongas). Y el final fue intenso, joder... lo que pasa es que no hubo casi posts.

En fin, muertos blog y blogger, empieza la nueva vida... A lo mejor nos vemos por ahí.

Un abrazo

5/24/2007

¿Me estoy haciendo viejo?

Aquí os dejo una serie de indicios para saber si te estás convirtiendo en un pureta:
  • Repetir mucho las cosas
  • Creerte el más guay
  • Dormirte mientras cagas
  • Montar pollos en los restaurantes
  • Hablar con los famosos que te encuentras por la calle
  • Emitir un sonido de queja cuando te levantas de la silla
  • Emitir un sonido de alivio cuando te sientas
  • Tener hijos
  • Darle una hostia al ordenador cuando se cuelga (con la intención de hacerlo funcionar de esta manera)
  • Llevarte el periódico al váter
  • Dar discursitos y lecciones
  • Votar al PP
  • Poner el ordenata en el salón de tu casa, y estar metido en Internet todo el día
  • Enseñar a tus familiares los correos electrónicos de coña que te llegan, en lugar de reenviárselos

La edad no importa: si cumples unas cuantas de estas, eres viejo.

¿Se te ocurre alguna más?

3/20/2007

Me lo temía

Fijaos en esto:

Sexo y evolución


Los astros se alinean de forma bastante chunga, y me parece bastante peligroso.

Nuestra culpa: maltratadores, machistas, misóginos... están por todos lados. Les reímos las gracias, dándoles aliento para seguir.

Su culpa: mujeres que quieren ser hombres (el otro día una compañera de trabajo me azotó el trasero según pasaba :S), feminismo exacerbado, tabúes autoimpuestos, hipocresía....

Así empiezan las guerras (recomiendo leer este breve relato del analandés). Sólo falta que descubran que no somos necesarios...

3/11/2007

Let's make the best of the situation

Vemga's style... yeah!

Eric Clapton & Friends - Layla

Otro lujazo repitiendo protagonista... me parece que se me ve el plumero.
Que lo disfrutéis!

2/10/2007

Ser Feliz

Interesante artículo:

Dinero y Felicidad

A mí el dinero no me interesa tanto (si me interesase no haría lo que hago), pero esto da que pensar sobre otras cosas. Me gusta el punto de vista comparativo: "soy más feliz si tengo más que tú". Está bien, pero me parece aplicable sobre todo a los hombres (incluyendo, por supuesto, a esos hombres sin pene a los que se refería el analandés). Un hombre quiere poseer más que su vecino, SER más.

Pero los hombres me aburren, hablemos de las mujeres (y de este grupo excluiremos a todos los hombres sin pene). Las mujeres ven afectados sus juicios por lo que yo llamo el "factor de refuerzo", que les hace interesarse por todo aquello que ya es apreciado por otras mujeres. La función que define el "factor de refuerzo" de una mujer es directamente proporcional al interés que el objeto suscita en sus homólogas, pero también lo es al cuadrado de la cercanía personal a ese grupo de mujeres previamente interesadas, más su número. De esta manera, tendríamos que:

R = I(C+N)^2

Donde:

R es el factor de refuerzo
I es la cantidad media de interés suscitado en otras mujeres
C es la cercanía media de las otras mujeres interesadas
N es el número de mujeres interesadas

La fórmula está simplificada utilizando medias para hacerla más comprensible. El verdadero factor se calcula como un sumatorio de factores individuales para cada una de las mujeres interesadas en el objeto.

Es jodido, porque según esto, una mujer no ansía tener más que los demás, sino que quiere tener aquello que tienen los demás. Sin embargo, os diré una cosa: las matemáticas no sirven para explicar a las mujeres. No os dejéis engañar.

Yo no soy un misógino. Yo admiro a las mujeres, y me cago en todo aquel que las odia. Eso sí, no me gustan las mujeres que quieren parecer hombres, ni nadie que no acepte lo que es natural e inevitable. Yo no niego lo evidente, ni lo inevitable: para ser feliz, las necesito a ellas.

2/01/2007

Resurrección

Todo cambia. La vida es así. Y como dijo el analandés, morimos para resucitar.

Uno de los clásicos se reencarna en sí mismo, y ya no es lo mismo:

Teatro Mágico de Vemga

Vemga! a disfrutar!

1/29/2007

Una década menos

Pues sí, ya me la he fundido. Tengo la sensación de estar sentado en el rompeolas, viendo amanecer con un cigarro en la mano después de una juerga increíble. Sin sueño ni prisas, voy repasando los mejores momentos de la noche: cuando llegué y saludé a mis amigos, cuando bailé, cuando bebí, cuando me encontré con un viejo conocido, cuando tuve esa conversación extraña con aquella chica de la barra, cuando me peleé, cuando gané al futbolín... cuando me dio su teléfono.

Ahora tengo 30 y una nueva vida por delante. Han pasado grandes cosas en estos 10 años, no podría citarlas todas. Me gustaría compartir con vosotros una de las cosas que han marcado esta década, mi gran pasión ya abandonada: la música. Os dejo por aquí algunas de las canciones del que fue mi grupo, FM.










No es que fuéramos gran cosa, pero estas canciones siempre marcarán para mí esa época en la que no teníamos más que problemas sin importancia, y durante la que nos hacíamos mayores sin darnos cuenta, queriendo ser niños para siempre.

Sed felices.